El presidente electo Donald Trump fue sentenciado este viernes sin castigo por el crimen de falsificación de registros comerciales en el pago de un soborno con el fin de silenciar a una actriz porno. La sentencia, equivalente a una libertad incondicional, ocurre después de que la Corte Suprema de Justicia se negó a intervenir.
La sentencia impuesta por el juez Juan Merchán implica que aunque el acusado es culpable, como ya determinó anteriormente un jurado, imponerle una pena de cárcel o alguna multa no resulta apropiada, en el caso de Trump, porque es el presidente electo y está por asumir el cargo.
Merchán dijo que, como con cualquier otro acusado, debía considerar los factores agravantes antes de imponer una sentencia, pero la protección legal que tendrá Trump como presidente “es un factor que prevalece sobre todos los demás”.
“A pesar de la extraordinaria amplitud de esas protecciones legales, un poder que no brindan es que no anulan el veredicto del jurado”, dijo el juez.
Oficialmente, Trump se convierte así en la primera persona condenada por un delito grave que asume la presidencia. El líder republicano, a punto de asumir su segundo mandado, ridiculizó el caso, el único de las cuatro acusaciones penales que ha ido a juicio.
Merchán destacó que se trató de un «caso extraordinario» y que tomó en cuenta el prestigio de la Presidencia, algo que, dijo, es independiente de quien ejerce el cargo.
“Señor, le deseo buena suerte en su segundo mandato en el cargo”, dijo Merchán después de imponer la sentencia.
En la audiencia, los abogados de Trump dejaron claro que buscarán apelar la sentencia.
«Esta ha sido una terrible experiencia. Y un retroceso para el sistema de justicia de Nueva York», dijo Trump al intervenir antes de que Merchán hiciera pública su sentencia, insistiendo en que el caso estaba politizado. Fue la primera y única vez que el futuro presidente habla ante el tribunal.
Cuál era el caso de Stormy Daniels
Trump fue acusado, y hallado culpable, de falsificar los registros de su negocio para ocultar un pago de 130,000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels, hechos al final de la campaña de 2016, para que no hablara sobre un encuentro sexual que, ella asegura, ambos tuvieron una década atrás.
Él dice que no pasó nada sexual entre ellos, y sostiene que sus adversarios políticos inventaron un proceso judicial falso para tratar de perjudicarlo.
Los fiscales dijeron que Daniels recibió pagos (a través del abogado personal de Trump en ese momento, Michael Cohen) como parte de un esfuerzo más amplio para evitar que los votantes se enteraran de las supuestas escapadas extramatrimoniales de Trump.
Pero los abogados de Trump dijeron que este quería silenciar las historias para proteger a su familia, no a su campaña. Y si bien los fiscales dijeron que los reembolsos de Cohen por pagarle a Daniels se registraron engañosamente como gastos legales, Trump dice que simplemente eso es lo que eran.
¿Por qué se tardó tanto la sentencia contra Trump?
Los abogados de Trump intentaron sin éxito evitar un juicio. Desde su condena en mayo por 34 cargos de falsificación de registros comerciales, recurrieron a todos los mecanismos legales a su alcance para intentar que se evitara la condena, se desestimara el caso o, al menos, se pospusiera la sentencia.
Presentaron diversos argumentos ante Merchan, los jueces de apelaciones de Nueva York y los tribunales federales, incluida la Corte Suprema. Los abogados de Trump se han apoyado fuertemente en afirmaciones de inmunidad presidencial frente al procesamiento, y recibieron un impulso en julio de una decisión de la Corte Suprema que otorga a los ex comandantes en jefe una inmunidad considerable.
Trump era un ciudadano privado y candidato presidencial cuando Daniels recibió su salario en 2016. Era presidente cuando se hicieron y registraron los reembolsos a Cohen el año siguiente.
Por un lado, la defensa de Trump argumentó que la inmunidad debería haber impedido a los jurados escuchar algunas pruebas, como el testimonio sobre algunas de sus conversaciones con la entonces directora de comunicaciones de la Casa Blanca, Hope Hicks.
Después de que Trump ganó las elecciones de noviembre pasado, sus abogados argumentaron que el caso tenía que ser desechado para evitar afectar su próxima presidencia y su transición a la Oficina Oval.
«Nadie está por encima de la ley»
Merchan, un demócrata, pospuso repetidamente la sentencia, inicialmente fijada para julio. Pero la semana pasada, fijó la fecha fnal, citando la necesidad de «cierre», asegurando que se esforzó, como explicó en la audiencia de sentencia, por equilibrar la necesidad de Trump de gobernar, el fallo de inmunidad de la Corte Suprema, el respeto debido a un veredicto del jurado y la expectativa del público de que «nadie está por encima de la ley».
Los abogados de Trump lanzaron una última oleada de esfuerzos de último minuto para bloquear la sentencia. Su última esperanza se desvaneció el jueves por la noche con un fallo de 5 a 4 de la Corte Suprema que se negó a retrasar la sentencia.
Los otros casos penales que alguna vez se cernieron sobre Trump han terminado o se han estancado antes del juicio.
El fiscal especial Jack Smith cerró los procesos federales sobre el manejo de documentos clasificados por parte de Trump y sus esfuerzos por revocar su derrota electoral de 2020 ante el demócrata Joe Biden. Un caso de interferencia electoral a nivel estatal en Georgia está estancado en la incertidumbre después de que la fiscal Fani Willis fuera removida del mismo.
Univision