NUEVA YORK.- Decenas de dominicanos residentes en El Bronx y el Alto Manhattan que se proponían viajar en las próximas semanas al estado de Florida para quedarse o visitar familiares y amigos, lo han suspendido tras la ley migratoria promulgada por el gobernador republicano, Ron DeSantis, contra los indocumentados.
Sostienen los quisqueyanos, no queriendo identificarse ni fotografiarse, por su status migratorio es irregular, que dichas medidas contienen múltiples restricciones y castigos que enfrentarían los indocumentados y aquellos que los ayuden.
Entre ellas, el que transporte o aloje algún indocumentado en su casa o apartamento será multado, los que acudan al Hospital se le preguntará sobre su estatus migratorio; no se les reconocerán licencias de conducir emitidas por otros estados, entre otras disposiciones.
Se estima que unos 800,000 indocumentados viven en Florida y por estas medidas se advierten crisis en el estado, especialmente en industrias de servicios, construcción y agricultura, se ha informado.
Este fin de semana, la Junta Directiva de la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP) emitió un aviso de viaje formal para el estado de Florida en respuesta a las controvertidas acciones tomadas por el gobernador DeSantis.
Estas medidas incluyen intento de borrar la historia de los negros y restringir los programas de diversidad, equidad e inclusión en las escuelas del estado, según explica la NAACP.
El aviso de viaje formal destaca que Florida es abiertamente hostil hacia los afroamericanos, las personas de color y las personas LGBTQ+.
La NAACP insta a los viajeros a comprender que el estado devalúa y margina las contribuciones y los desafíos que enfrentan estas comunidades, según menciona el comunicado.
La organización ahora está haciendo un llamado a los residentes de Florida y a los simpatizantes a unirse a sus esfuerzos para derrotar las políticas regresivas del gobernador y la legislatura estatal. Para obtener más información visita www.naacp.org
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