Un condado rural de Arizona certificó el jueves los resultados de las elecciones intermedias, siguiendo la orden de un juez que dictaminó que los supervisores republicanos quebrantaron la ley cuando se negaron a firmar el recuento de votos antes del plazo fijado para esta semana.
Dos republicanos de la junta de supervisores del condado, que cuenta con tres miembros, se negaron durante semanas a certificar los resultados, incluso después de que se cumplió el plazo el lunes. No mencionaron ningún problema con los resultados de las elecciones. En lugar de eso, señalaron que no estaban convencidos de que las máquinas utilizadas para tabular los votos estuvieran debidamente certificadas para su uso en las elecciones, aunque los funcionarios electorales estatales y federales han dicho que sí lo estaban.
La secretaria de Estado Katie Hobbs presentó una demanda el lunes, al igual que un votante local y un grupo de jubilados, argumentando que los supervisores están obligados por ley a certificar la elección. Hobbs dice que está obligada a realizar la certificación estatal el 5 de diciembre y que por ley sólo puede retrasarla hasta el 8 de diciembre.
Al término de la audiencia el jueves, el juez Casey McGinley ordenó a los supervisores que se reunieran dentro de 90 minutos y aprobaran los resultados de las elecciones para el final del día.
“No me avergüenzo de nada de lo que hice”, señaló la supervisora Peggy Judd, una de los dos republicanos que impidieron la certificación en dos ocasiones. “Y hoy siento que debo hacerlo por un fallo de la corte y por mi propia salud y situaciones que están pasando en nuestra vida, siento que debo seguir lo que el juez hizo hoy”, añadió.
El otro republicano de la junta, Tom Crosby, no asistió a la reunión.
Dos horas antes, la supervisora Ann English, la única demócrata de la junta, pidió al juez que ordenara a la junta que certificara inmediatamente los resultados de las elecciones y no esperara otro día más. Señaló que Crosby está tratando de montar “un enfrentamiento entre la secretaria de Estado y los negacionistas electorales” en una reunión prevista para el viernes.
“Creo que es un circo que no tiene por qué ocurrir”, dijo English. “Ya estoy harta. Creo que el público ha tenido suficiente. Así que pido una resolución rápida de esto si es posible”.
La votación permite que ocurra la certificación estatal tal y como está prevista para el lunes.
Hobbs, una demócrata que fue elegida para el cargo de gobernadora en las elecciones de noviembre, había advertido que tendría que certificar los resultados sin las cifras del condado de Cochise si no se recibían a tiempo, un desenlace que habría cambiado la balanza en varias contiendas reñidas. Los 47.000 votos del condado fueron mayoritariamente para los republicanos.
LISTINDIARIO